Desde el encuentro y el re-conocimiento del otro como sujeto de saber, nos adentramos en el
mundo rurbano, sus objetos, prácticas y escenarios característicos.
Con ellos y desde sus relatos, descubrimos que detrás de esos “simples” carros y caballos hay un
modo de vida, una vida vivida que merece y demanda ser reconocida.
“Más que carros y caballos”…para que los significados afloren, para que los objetos se carguen de
densidad, para escuchar y leer las narraciones de quienes se ganan la vida y miran la ciudad desde un
carro.